martes, 10 de enero de 2012

Estar conectado con uno mismo



Si una persona tiene demasiada energía, demasiadas experiencias, existe la posibilidad de que se desconecte de sí misma.


Es sabido que hay personas que dan mucho y sienten que pierden; esa no es la manera adecuada de dar. Si das, no debes sentir que pierdes, porque entonces lo que estás dando no es un buen regalo. Lo mismo se aplica al amor. Hay quien dice: "Traté de dar muchísimo amor, pero no fui correspondido", y lo vive así. Estaba dando más de lo que podía dar.


Un buen regalo proviene de estar conectado con uno mismo. Si das lo mejor que puedes sin perder la conexión contigo, no hay dolor. Así que, cuando des, no te debes desconectar de ti mismo. Esto es válido en toda situación. Por ejemplo, cuando una persona se enamora, se puede identificar tanto con la otra persona que se desconecta de sí misma. Pero es posible dar muchísimo sin desconectarse, y eso es una relación muy bella. Sin embargo, no es tan fácil; es cuestión de equilibrio entre dos polos: la claridad y el vacío. Así lo expresan las enseñanzas. La claridad sería la energía, lo que damos, y si no nos desconectamos de nosotros mismos, no perdemos el vacío, ni sufrimos. Cuando estás dando, amando, trabajando, haciendo que las cosas sucedan, si estás desconectado de ti mismo, se produce el sufrimiento. Cuando no se cumplen tus expectativas, sufres mucho más que si estás conectado contigo mismo. El poder de estar conectado con uno mismo es enorme...



"La esencia pura de la mente". Tenzin Wangyal Rimpoché.